Sin derecho a celebrar la Pascua

En Khayari, una pequeña ciudad de Egipto, los cristianos están bajo amenaza y se les prohíbe reunirse para orar y congregarse

Puertas Abiertas • 29 mar. 2024


A diferencia de otras ciudades de Egipto, donde los cristianos pueden reunirse en sus iglesias para adorar y orar, esto no es posible en Khayari (foto representativa)

A diferencia de otras ciudades de Egipto, donde los cristianos pueden reunirse en sus iglesias para adorar y orar, esto no es posible en Khayari (foto representativa)

Job (seudónimo) es un cristiano egipcio, esposo y padre solícito de tres hijos. La iglesia más cercana se encuentra en un pueblo cercano, lo que significa que, de camino a la iglesia, la familia puede ser insultada y atacada. Sus hijas podrían ser acosadas fácilmente. Otra posibilidad es encontrar a alguien que esté dispuesto a abrir su casa y que se reúnan allí para orar.

Normalmente, en Semana Santa, los cristianos egipcios como Job piden permiso a la comunidad islámica para preparar y celebrar la Pascua en casa de uno de los vecinos, para poder orar en paz. Sin embargo, media hora después de comenzar el culto, musulmanes radicales atacaron a los cristianos con piedras e insultos.

Según los islamistas radicales, los cristianos no pertenecen a Egipto ni a ningún otro lugar. Job explica que, para los extremistas, los seguidores de Jesús deben ser tratados como infieles, adoradores de una cruz, los que creen en tres dioses.

En cada reunión de oración, los cristianos son atacados e insultados. Los musulmanes radicales de la región siembran el miedo para asegurarse de que los cristianos ya no oren ni construyan una iglesia.

Durante la Navidad, la escena era la misma. Los cristianos se reunían en una casa para orar. Fueron atacados e insultados, y robaron en sus casas y tiendas. Cuando llegó la policía, los agentes se llevaron a todos a comisaría: a los responsables del ataque y a las víctimas. Finalmente, todos fueron puestos en libertad y se les advirtió que no volvieran a enfrentarse.

Ninguno de los responsables del ataque fue detenido ni condenado. Tras ser puestos en libertad, amenazaron al propietario de la casa donde se habían reunido los cristianos y le obligaron a él y a su familia a abandonar la casa, pues de lo contrario los matarían.

Sin permiso para orar

Los musulmanes radicales de la región siembran el miedo para asegurarse de que los cristianos ya no oren ni construyan una iglesia (foto representativa)

Todo esto ocurrió en una pequeña ciudad llamada Khayari, en el Alto Egipto. Los musulmanes radicales de la zona no permiten a los cristianos construir una iglesia, ni siquiera renovar una antigua que no se esté utilizando. Es más, cada vez que los seguidores de Jesús se reúnen a orar en una casa, son atacados con piedras e insultos. Los dueños de casa son aún más atacados.

El pueblo está situado en una región llamada Minia, capital de la provincia. Alrededor del 50% de la población de la zona son cristianos coptos. Se trata de la mayor concentración de cristianos de Egipto y permanecen allí a pesar de que no hay ninguna iglesia donde puedan reunirse y orar. Sin embargo, Job se trasladó con su familia a la capital del país, El Cairo, y vive allí desde entonces.

Sin permiso para construir una iglesia

En la aldea egipcia de Khayari, alrededor del 50% de la población es cristiana, pero no tienen ningún lugar donde reunirse

A pesar del gran número de cristianos, Khayari está lleno de musulmanes radicales que saben que la ley está de su parte, o al menos no en su contra. Así que tienen un objetivo: atormentar a los cristianos, atacarlos, insultarlos, interrumpirlos durante las oraciones, arrastrarlos a discusiones. Los cristianos son injuriados y no tienen a nadie que los proteja. Además de las presiones de la vida, se enfrentan a persecuciones diarias.

Sin embargo, armados con su fe, perseverancia y lo que les quedaba de esperanza, los cristianos locales compraron un terreno con algunas paredes pero sin tejado. Querían construir allí su futura iglesia. Era un buen lugar para reunirse y orar. Sin embargo, musulmanes radicales se enteraron y, además de robar todos los materiales y equipos, destruyeron lo que ya había, dejándolos sin nada.

A pesar de ello, no fueron abandonados. Sabemos que el mundo causará problemas a los cristianos, pero el Señor dice: "La paz les dejo; mi paz les doy. No la doy como el mundo la da. No se inquieten sus corazones, ni tengan miedo". (Juan 14.27) y "No teman a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma. Sino teman al que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno". (Mateo 10.28) Su justicia no es de este mundo. Con o sin un lugar donde orar, sus esperanzas permanecerán.

Peticiones de oración

  • Pide al Señor que cuide de Job, de su familia y de todos los cristianos de Khayari y de toda la región de Minia.
  • Ruega por protección contra todo tipo de persecución y ataques.
  • Ruega para que Dios toque los corazones de los no cristianos, para que encuentren a Jesús, reconozcan la luz y sigan el único camino.

Uno con ellos

Los ataques a iglesias, escuelas y hospitales son una táctica utilizada para atemorizar a los cristianos y acabar con su presencia e influencia en la comunidad. Las iglesias que han sido atacadas necesitan ser restauradas para que puedan volver a marcar la diferencia en sus comunidades. Tu donación permite que las iglesias destruidas sean restauradas y sigan representando el Reino de Dios en las comunidades donde se encuentran.

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Puertas Abiertas es una organización internacional que actúa en más de 60 países donde existe algún tipo de amenaza a la vida de los cristianos y/o a su libertad de creer y rendir culto a Jesucristo.

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